¿Por qué una escuela de escritores en Badajoz?
La escritura es, de todas las artes, la más íntima, la más privada. La música, el teatro y el cine se representan y disfrutan en colectividad; incluso la pintura y la escultura dan lugar a la generación de obras colectivas, al estilo de los talleres de los grandes maestros renacentistas (mientras escribo esto, mi mujer y mi hijo pintan un mural con pies y manos en el salón de mi casa) y, si no, es innegable que un misma obra plástica puede ser disfrutada de manera simultánea por varios espectadores.
Sin embargo, la escritura y por extensión, la literatura, se han afianzado en la modernidad como actos individuales, asociados a la intimidad, aunque sean llevados a cabo en lugares públicos como el metro, la plaza o la terraza de un café. Nosotros no tenemos como objetivo atentar contra esta privacidad, que nos sedujo hace muchos años y a la que le debemos algunos de los mejores momentos de nuestra vida; es la individualidad la que no favorece al escritor, como no favorece a ningún profesional o aprendiz de un oficio el desarrollar su tarea aislado de sus iguales, sin compartir con ellos el camino, las mieles y las hieles de tan apasionante aventura, el viaje al fin y al cabo, que nos lleva a escribirnos.
La conciencia de colectividad ha dado como fruto, quizás no las mejores obras, pero sí los mejores artistas. Evocad los rostros de felicidad de esos escritores del 27 en los retratos de la época, de los surrealistas o modernistas. Sus grupos de trabajo, pues de ahí es de donde surgen esas generaciones activas y autodenominadas, fueron el caldo de cultivo para obras, tendencias, publicaciones, colaboraciones y funcionaban, en muchos casos, como talleres.
El CELARD ha sido creado para albergar ese espacio de encuentro, de trabajo, de colaboración, de aprendizaje recíproco, de análisis crítico, no sólo de textos, sino también de esta realidad. El arte, recordando al escritor uruguayo Eduardo Galeano, debe ayudar a mirar, y un taller literario es un lugar donde entrenar esa mirada y compartirla.